El cuerpo disfruta con el movimiento
06Nuestro cuerpo disfruta con el movimiento, lo veo de forma constante en todas las sesiones presenciales que realizó, incluso en personas que tienen dolor, siempre y cuando se utilicen indicaciones basadas en su función.
No es necesario flexionar, elevar, ni tampoco estirar, empujar, contraer ni forzar ninguna parte que el cuerpo no desee mover de forma natural.
De hecho, la mayoría de esas acciones simplemente crean tensión, que es opuesta al movimiento.
Algunas indicaciones pueden incluso hacernos creer que no somos capaces porque no las entendemos o no conseguimos hacer aquello que se nos pide.
Cualquier postura, cualquier movimiento, deben representar estabilidad y comodidad. Esto surge cuando todo el esfuerzo se relaja y se alcanza la unión. Es entonces cuando uno ya no se siente turbado y los opuestos se disuelven.
Es entonces cuando uno puede percibir una mejoría en la calidad, la coordinación, la velocidad y muchos otros factores relacionados con el movimiento y el cuerpo puede disfrutar de él conscientemente.